miércoles, 18 de marzo de 2009

Jaen: Jerez y más Jerez en el espectáculo flamenco de El Pipa


(Ideal.es)
Jerez y más Jerez en el espectáculo flamenco de 'El Pipa'
El bailaor jerezano se ha caracterizado por reivindica su cuna natal
Antonio Ríos Fernández 'El Pipa', siempre se ha distinguido por resaltar y reivindicar su cuna natal, Jerez de la Frontera. Ya lo inició con 'Generaciones', su primera puesta en escena, en la que intentaba representar las costumbres y el arte de las familias gitanas de las gañanías jerezanas. Más adelante lo continuará con obras como 'Puntales', 'Trilogía' o 'De la tierra'. Y es que esta es una premisa de muchos clanes flamencos jerezanos. Quizás se lo haya inculcado su abuela 'Tía Juana la del Pipa', aunque considero que esta reivindicación pertenece a la influencia de Manuel Moreno Jiménez 'Morao de Jerez'.
En 'De Tablao', 'El Pipa' intenta -y lo consigue- representar la vida de los locales que formaron a las dos últimas generaciones de artistas flamencos, los que se consagraron como tales en la segunda mitad del siglo XX. Quiere homenajear lo vivido en 'Los Canasteros', 'Zambra', Las Brujas', 'El Café de Chinitas', 'Torres Bermejas', etc. Y lo establece trasladando a un grupo de artistas de su tierra al imaginado tablao, utilizando para ello el clásico repertorio de estilos flamencos que generalmente interpretan los de Jerez.
Inicio de la obra
La obra se abre con una puesta en escena inicial desenfadada y festera que aborda el regocijo primero del espectáculo que se enfoca por las coplas populares que recogiera García Lorca, para seguidamente llenar el escenario de ritmo y compás con las bulerías jerezanas, en las que se da protagonismo a la pareja de criaturas que conviven familiarmente con los artistas en el -supuesto- tablao con el afán de llegar a ser alguien en el flamenco, los cuales apuntan con prestancia artística.
Aparece seguidamente la esbelta figura de 'El Pipa' para establecer su escuela familiar por alegrías, con una presentación elegante y flamenca, adecuada medida del escenario, con dominio de los giros y acompasados desplantes, configurando su personalidad en las partes lentas y breves derivaciones a las bulerías, para seguidamente recoger el aire de las alegrías y reiterar el estilo, que con preciso taconeo (es decir, sin abusar), redondea con las clásicas bulerías de Cádiz para darle sonoro final. Y como en los tablaos existía el enamoramiento entre artistas, aquí también, eligiendo la primera figura a su compañera.
Para corroborar la elección Claudia Cruz, con un magnífico cante por siguiriyas de Juan Junquera y cambio de Manuel Molina de María Mezcle, condicionó a los asistentes a profundizar en el pellizco y el sentimiento del estilo, con un baile sobrio y flamenco, pleno de enjundia. Posteriormente se desarrolló esa especie de transición a la segunda parte de la coreografía donde María Mezcle denotó su poderío tonal con caracoles -algo estentórea en ocasiones- con sonoridades taranteras de Pascual de Lorca y determinado virtuosismo guitarrístico de Javi Ibáñez, para así dar paso a la guajira, estilo que se utilizaba en los tablaos para relajar y reintentar la atención de los presentes al flamenco más 'jondo'. Muy bien aquí la jovencísima Macarena Sánchez, pues denotó frescura y sensualidad en la composición de la figura flamenca.
Singular figura
Tras una soleá por bulerías en la que participó todo el cuadro, adobada de chufla flamenca al estilo de Diego Carrasco, nuevamente la singular figura de 'El Pipa' se adueñó del escenario para estructurar un baile por soleá pleno de compás y matices jerezanos, en la que sus brazos y taconeo respondieron a las influencias de Escudero-Gades, con determinados complementos del localismo bailaor de su tierra, desembocando en dar un acertado primer lugar a los cantaores en el que Gori Muñoz (de los de Sanlúcar) demostró con profundidad conocer a Juaniquín de Lebrija, y Morenito de Íllora dominar la creatividad de Manuel Torre por El Mellizo, así como María Mezcle estructurar con potencia el personalismo de la Roesna, derivando todos hacia el corrido gitano o romance antiguo con fiesta y ritmo de bulerías 'pa bailar'. Buen bis de 'El Pipa' por zapateado.

No hay comentarios:

Publicar un comentario